Torrevieja solicita al Ministerio del Interior que autorice la consulta popular sobre la playa canina

El Ayuntamiento de Torrevieja tiene previsto debatir en un pleno extraordinario el próximo martes la solicitud de autorización al Ministerio del Interior de la consulta popular para elección de playa canina. El gobierno de izquierdas en minoría tenía previsto que esta consulta pudiera coincidir con las municipales.

Los plazos, como avanzó este diario, lo hicieron imposible. El principal retraso sobre la previsión municipal tiene su origen el Plan de Infraestructuras Verdes del Litoral. Hasta que ese plan supramunicipal del Consell no ha estado aprobado, algo que sucedió a principios de 2018, no se pudo avanzar en el expediente. De hecho, esa legislación ha protegido el tramo litoral de Ferrís, inicialmente apuntado como una de las opciones, lo que descarta esta cala entre la terna de las que se van a someter a consulta popular.

Ahora el expediente está completo y el concejal de Izquierda Unida, Víctor Ferrández -que no repetirá en la Corporación-cumple su compromiso de que desde el punto de vista legal la consulta pueda recibir el visto bueno. El Gobierno de España no está obligado a responder inmediatamente. En que se celebre la consulta había consenso de los siete partidos políticos con representación municipal -no así en la ubicación de la playa-

La pregunta textual a los vecinos será: «¿Cuál de los entornos que a continuación se relacionan considera usted más idóneo para permitir el baño de perros, y en consecuencia, ubicar de manera definitiva el área de playa canina en Torrevieja: Punta Margalló (una zona urbana); Cala Carabineros (en el extremo sur del litoral; Cala de los Trabajos y Cala del Moro.

Las tres últimas ubicaciones con el condicionante ambiental de no poder ser utilizadas entre el 1 de marzo y el 30 de junio. Se ha descartado Ferrís y La Mata. Ahora hay dos tramos de playas caninas provisionales: la playa de la Cala del Moro-y Punta Margalló.